LAS BEJARANO.
Un sainete republicano con sabor a torta de plátano.
Inspirada en el cuento de Antonio Arráiz
Con:
Abilio Torres, como: Magdalena
Jean Manuel Pérez, como: Belén
Albert Smth, como: Eduvigis
“Las Bejarano” Compuesta por tres bellas hermanas, tres hermosas morenas. Magdalena, Eduvigis y Belén Bejarano. Ellas estaban de moda. A la luz de las bujías perfumadas en las noches de baile de cotillón, eran motivo de diálogo y críticas. Son tres, como le digo. Jóvenes, simpáticas, de color, pero con gracia exuberante, donaire, garbosas, del que hacían derroche las hermosas hermanas. Cabellos y ojos negros, refulgiendo en ellas una alegre chispa de crueldad, un mohín de petulancia en la nariz respingada, la cintura como un anillo, la boca carnosa y el busto digno de una diosa. Así eran las Bejarano.
Estas mujeres…tenían en su ser, en su composición física y espiritual, el gracejo de España, la sensualidad de África y la melancolía de la indígena latinoamericana. De sus habilidosas manos salían las delicias reposteras que surtía buena parte de la ciudad caraqueña. Ellas eran maestras en ese arte. Las diferentes clases sociales que componían la sociedad de entonces, saborearon los productos que ellas elaboraban. Y entre cotilleos, comentarios y chanzas, ellas nos relatan los acontecimientos del 5 de julio de 1811.
Pero no sólo eso. También las Bejarano fueron comidilla en la chismografía de entonces. Y todo porque las hermosas pardas llegaron a tener dinero y pudieron hacer uso del “derecho” otorgado por la real cédula conocida como de “Gracias al Sacar”, mejor dicho compraron su blancura, con la vía expedita de ascenso social que el monarca español Carlos IV había promulgado en 1795 para inmenso disgusto de los blancos criollos, racistas a carta cabal y llorosos por el bien ajeno.
WILFREDO (Trankylyno) TORTOSA
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